Friday, July 3, 2015

Chile debe tener miedo... y Argentina también.

¡CHI CHI CHI SEIS SEIS SEIS!

Así titulaba el Diario Olé argentino su portada después de la exhibición de la albiceleste frente a Paraguay. Un dardo lanzado directamente con toda alevosía a los corazones de los chilenos (utilizando su canto de guerra para meter miedo).

Los argentinos saben que los chilenos han sido sus "clientes" históricamente. En 24 ocasiones se han enfrentado por Copa América: 19 victorias albicelestes, 5 empates y si, ningún triunfo de los chilenos. Es impresionante el dominio futbolístico y psicológico que existe entre uno y otro. 

Y además, este miedo se extiende por la forma en la que Argentina jugo los 90 minutos previos a la final (no tanto así en los partidos anteriores, pero...): aplastando a su rival, jugando bien, siendo absolutamente contundente y teniendo a su máxima figura, Lionel Messi, en un gran momento y dando nada más y nada menos que tres asistencias y dejando una imagen de liderazgo y solidez a solo pocos días de enfrentar la Final de la Copa América. 

Citando a Pedro Cifuentes (El País), los mismos diarios chilenos hicieron eco de la goleada argentina: “Miedo” y “susto” fueron palabras habituales en los titulares de la prensa chilena durante la resaca del 6-1 a Paraguay. “Argentina pasa asustando”, encabezó La Tercera su crónica. “Argentina llega a la final como una aplanadora”, expresó a su vez Mercurio, “y amenaza el sueño de la Roja”. El Gráfico, diario deportivo, fue más escueto: “Argentina mete miedo”.

¿Chile debe tener miedo? Por supuesto que sí. Enfrentara a la mejor plantilla del torneo, la amplia favorita desde el principio para la prensa y casas de apuestas. Tiene en Martino, un técnico que ha recuperado y potenciado las habilidades y forma de jugadores importantes como Pastore y Di Maria. Y también,  como cereza, tiene al mejor jugador del mundo que ha retomado este año, esa plenitud futbolística que le añorábamos en el último par de temporadas: Lionel Messi.


Messi por si solo tiene esa loza pesada que sus compatriotas le han echado encima durante mucho tiempo, ser el mejor jugador del mundo y no ganar nada con tu selección es un pecado nacional (Tomando en cuenta la base histórica y latente de Diego Armando Maradona). Lionel se quiere zafar de eso el sábado, la espina de la Final del Mundial sigue fresca, y otro fracaso más con la albiceleste podría resultar traumático. Este año viene de ganar un triplete con el Barcelona, ¿qué mejor forma de cerrar la temporada ganando la Copa América con tu país?

Pero entonces ¿Argentina debe tener miedo? 
Tendré que responder también con un contundente ¡SI!

Argentina va enfrentar a una selección chilena que no solo es la anfitriona y tendrá el apoyo de los más de 45 mil espectadores que asistirán al Estadio Nacional Julio Martínez Pradanos. Sino que presume de tener a la mejor generación de jugadores de toda su historia. Es para mí, el equipo que en términos generales, ha desplegado y  jugado al mejor futbol durante todo el torneo. Y los números avalan al equipo de Sampaoli: le mejor ofensiva con el máximo número de goles realizados, el equipo con mayor posesión, y tienen al día de hoy, al  goleador del torneo: Edu Vargas.

En sus filas tienen un desatascador de partidos y mago como Jorge Valdivia, que está compitiendo mano a mano con Messi (obviando cualquier comparación odiosa), por ser el jugador más valioso del torneo, por la influencia que ha ejercido en su selección, en los goles y en los resultados que han obtenido los chilenos a lo largo de la Copa.


Y si, el país entero reclama que su niño mimado, Alexis Sanchez, dé el partido de su vida con la selección, tendrá el escenario perfecto, su gente y su país, por la Copa más importante del continente.

Chile es un país que está envuelto (como casi todos los países latinoamericanos) en crisis y conflictos políticos y sociales. Parecen todos, incluida su presidenta, dispuestos a darse un respiro de 90, 120 o los minutos que sean necesarios para dar una alegría a un pueblo lastimado.


Si algo ha caracterizado a Chile en esta copa, es la presión asfixiante que los de Sampaoli realizan a las primeras líneas de sus rivales. Y enfrente, un equipo que prioriza la salida con balón controlado. Creo que tendremos, y ojala así sea, una final tremendamente espectacular y con mucho dramatismo.

Así que para los que me preguntaron:
 

-¿Chile debería tener miedo a Argentina?-
-Por supuesto. Pero cuidado, que Argentina también.